No es la primera vez, claro. No es la misma sensación, ni tengo los mismos nervios.
En todo caso, si, lo que tengo es alegría y satisfacción. Porque a cierta edad, «la lucha es de igual a igual contra uno mismo», cómo dice Abonizio, y «eso es ganarla»
Mientras escribo esto, faltan cincuenta minutos exactos para que el sistema automáticamente ponga online «la cosa pública». Un nuevo sitio de internet, que no ofrecerá nada que no hayamos conocido ya, pero que será desde mañana y hasta quién sabe cuando, un lugar desde donde muchos, podremos decir lo que queremos decir, sin andar pidiendo permisos ni consultando a dueños.
A diferencia de las anteriores, y habiendo aprendido de las experiencias, esta vez no vamos a correr con riesgos que implican la primicia, la urgencia, el último momento, y esas cosas que suelen quitarnos el sueño a los periodistas, vamos a ir de a poco. Lentamente y lo más profundo que podamos en el abordaje de todos los temas.
Es obvio, y demasiado público, que tengo mis posiciones políticas. Y no pienso dejar de tenerlas. De hecho creo que es conveniente que el lector sepa desde donde escribimos y aún más, quienes son los que hacen posible financieramente el ejercicio de nuestro trabajo.
Pero eso de ninguna manera nos impedirá cumplir con las reglas sagradas del periodismo. «decir, dejar decir y respetar a los que dicen otra cosa». Ejercer con responsabilidad la oportunidad de expresarnos libremente, ofrecernos como lugar de expresión de los que piensan diferente y ser rigurosos. Que no significa otra cosa que NO MENTIR.
Estoy muy feliz. Ha sido esta semana, la semana de mi efectiva re-inserción en los medios de Santa Fe. Volví a la radio en Aire de Santa Fe, y esta noche, ponemos on line un sitio que no por común, dejará de ser diferente. Como todo lo que afortunadamente hicimos a lo largo de los últimos 25 años.
Y a esta edad… «¿ todavía tenés ganas?» me preguntó un colega jóven el otro día.
Y si. Muchas ganas. Tantas como ilusión. Precisamente por eso. Porque a cierta edad, ya sabemos quienes somos, ya entendemos distinguir lo importante de lo secundario, y por sobre todas las cosas, ya sabemos que queremos. De nosotros y del mundo.
A parir, una vez más. Nace La Cosa Pública, y hoy no significa mucho. En el futuro, lo sé, significará mucho para muchos. Pero para eso falta mucho. En el medio, hay que trabajar, ser honestos para no ser descalificados con razones y ser coherentes.
Ya sabemos como se hace, ya sabemos que podemos. Ya sabemos parir.