Aprovecho estas líneas para agradecer la solidaridad de centenares de personas que se hicieron eco del robo en REC. ¿Pudo ser un robo casual? Si, claro. Pero todo parece indicar que no.
Hace muchos años, me lo recordaron en estas horas mis compañeros de entonces Hector Galiano, Luciana Mascheroni y Ana Laura Costa, nos sucedió lo mismo en la vieja sede de Notife.Com. Entonces, vaya curiosidad, gobernaba el PJ. Y se llevaron una computadora con archivos valiosos. Entonces estábamos molestando con algunas investigaciones sobre «ropa de trabajo» a UPCN…Nunca supimos quienes nos robaron aquella PC. Supongo, que tampoco sabremos quienes se llevaron la Notebook de REC. Por suerte, no tenía ninguna información de valor. Las paradojas del destino: en estos dias, tambien, en algunas columnas critiqué, además de a ATE Y AMSAFE, a UPCN. Y unos días antes del robo, el Secretario General del Gremio, le hizo saber a un amigo en común que estaba muy molesto por un post mío en Facebook, en el que contaba su viaje conjunto a Brasil para alentar a Unión, con el Ministro Walter Agosto. En vísperas de una reunión paritaria clave.
No implica esto nada. No estoy acusando a nadie. Es más: para mi paz familiar y personal, deseo fervientemente que se trate de un robo común. Si por el contrario, este es un «aviso», tengo razones para temer. Y ya le manifesté a la fiscal los nombres de quienes sospecho.
Para que lo sepan ellos también. No sea cosa que se les ocurra ir con algo «más fuerte».
No quiero seguir con este asunto. Lo que viene es REC. Eso me ocupa toda la energía de mi cabeza. Allá quien haya sido. Y que le haga provecho la Notebook. Ahora ya tenemos alarmas, cámaras, rejas y estamos por cambiar la puerta de la calle para que no puedan volver a entrar «con tanta facilidad».
Les dejo mi columna en video.Necesitaba hacerla. Y ahí, les cuento las pocas cosas que realmente sé.
GRACIAS de nuevo a TODOS los que llamaron. Y a los que no, por ejemplo el gobernador, sus funcionarios de prensa y seguridad, gracias también. Algunos silencios desnudan las almas.